No es de un partido de béisbol ni de una pelea de boxeo de lo que se trata este artículo sino de una duda que quisiera compartir con ustedes. Ante todo, quiero aclarar que no tengo nada en contra del Código Abierto (OS del inglés Open Source) a pesar de ser un fiel defensor de los productos Microsoft.

Precisamente fue Bill Gates el que en un comunicado a la comunidad de usuarios y desarrolladores de software lanza un llamado a la reflexión sobre la “piratería” iniciando así el fenómeno de licenciamiento de software. Las respuestas no se hicieron esperar y enseguida se crearon movimientos contrarios a esta política con ligeras diferencias entre ellos, manteniendo como divisa que el conocimiento era de todos. Ejemplos tenemos a BSD, GNU y OS que es el que nos ataña.

Dentro de sus características nos referiremos a la que precisamente le da nombre, la que permite que los productos que se comercialicen bajo esta licencia vayan acompañados de su código fuente. Ahora bien, por otra parte, tenemos al encapsulamiento que no es más que un mecanismo que permite a los diseñadores de tipos de datos determinar qué miembros de los tipos creen pueden ser utilizados por otros programadores y cuáles no.

Entonces tenemos a los que por una parte pregonan que el código fuente es de domino público mientras que por otra encapsulan sus tipos tanto como pueden. ¿No creen que por absurda que parezca existe una paradoja en lo antes planteado?